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$4.200
Mordedor sensorial en forma de diente de tiburón, pendiente de largo ajustable con broche breakaway que cede ante un tirón, seguro para párvulos y juegos infantiles.
Un mordedor sensorial permite: focalizar la concentración, canalizar la ansiedad, manejar el estrés, estimular la oralidad, regular el sistema propioceptivo y de concienciación oral.
La masticación proporciona mucha información sensorial a la mandíbula que sacia y resulta muy relajante. Aceptando que masticar pueda ser un mecanismo calmante, especialmente para personas con TPS trastorno de procesamiento sensorial, espectro autista, síndrome de Down o parálisis cerebral.
100% silicona con un nivel de dureza de 60A en la escala A shore.
Recomendable para: Personas que de no tener un mordedor sensorial buscan morder ropa, cabello, cordones, objetos de silicona o chupetes.
Reorientar onicofagia o chupar dedos.
Primer mordedor sensorial, recomendable para probar si es suficiente para la necesidad.
Este nivel de fuerza de mordida, en la segunda infancia y adultez, incide en la selectividad alimenticia, prefieren comidas blandas.
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